Historia
Rodeado de viñedos y de tradicionales casas de labor, El Borge es la capital indiscutible de la pasa. El municipio se extiende por el territorio fronterizo entre la comarca de la Axarquía y los Montes de Málaga, ofreciendo un paisaje rural que el tiempo no ha sido capaz de alterar.
En este pueblo de origen árabe predomina el blanco de sus casas en contraposición con el colorido de las flores que adornan ventanas y balcones.
El Borge, además, es un punto de referencia para conocer el fenómeno del bandolerismo andaluz.
Monumentos
El Borge posee uno de los edificios religiosos más originales de la Axarquía: la iglesia de Nuestra Señora del Rosario. Construida en el siglo XVI, es una combinación de los estilos gótico tardío y renacentista con elementos mudéjares y barrocos. Del templo, declarado Monumento del Patrimonio Histórico Andaluz, destacan sus camarines del siglo XVIII, su armadura de madera y su torre con tejado de cerámica vidriada.
Caminando por la villa te encontrarás con la fuente del Cuerno, de origen árabe, y con la fuente de la Vendimia, cuyas aguas provienen del manantial de la Fuensanta. Esta última, situada en las proximidades de un típico lagar, está decorada con la escultura de un vendimiador.
En la entrada del pueblo se alza el Arco de la Pasa, con el que se rinde homenaje al producto más típico de El Borge. El monumento incluye dos murales dedicados al célebre teólogo Martín Vázquez Ciruela y al médico y botánico árabe Ibn-Baitar.
El Barrio del Rinconcillo es otro lugar de obligado paso por las peculiaridades de su trazado urbano. Es aquí donde mejor se puede apreciar cómo la arquitectura popular adopta eficaces soluciones para salvar las irregularidades del terreno montañoso de El Borge.